En esta sección del tercer episodio de Estación del Silencio realizamos una radiografía de los datos de la violencia económica en el El Salvador, Guatemala y Honduras.
Entender la violencia económica implica bucear en una gran variedad de datos. El acceso a la tierra de las mujeres, el número de propiedades y vehículos a su nombre, el porcentaje de empleadas en la economía formal… Además, por supuesto, de las denuncias, los casos abiertos y las sentencias condenatorias y absolutorias.
Para este episodio de Estación del Silencio realizamos solicitudes de información a diferentes instituciones públicas de los tres países: las fiscalías, los organismos judiciales, los institutos de seguridad social, los fondos e institutos de tierras, los registros de la propiedad…
Sin embargo, en esta sección de datos hay algunas ausencias. Para empezar, aunque la violencia económica exista en los tres países, únicamente en Guatemala está tipificada como delito. En El Salvador y Honduras hay otros delitos que pueden considerarse violencia económica de facto, y que incluimos en este apartado, para terminar de perfilar el fenómeno.
Además, algunas instituciones de El Salvador, Guatemala y Honduras no entregaron la información solicitada. Unas argumentaron no tenerla desglosada por sexo, así que no fue posible hacer un análisis de género. Otras no cumplieron con los plazos de las leyes de información pública y nunca enviaron los datos.
“Estación del Silencio” es un proyecto transnacional coordinado por Agencia Ocote que investiga y reflexiona sobre las violencias contra las mujeres en Mesoamérica. Este texto es parte de la segunda entrega sobre mujeres desaparecidas, en la que participan: Agencia Ocote (Guatemala), elFaro (El Salvador) y ContraCorriente (Honduras).
Financiamiento de Foundation for a Just Society, con apoyo de Oak Foundation y Fondo Centroamericano de Mujeres.